También sobre la deuda externa, la CEPAL contradice a la oposición venezolana

En una permanente campaña contra el gobierno de Hugo Chávez, la oposición venezolana en alianza (o complicidad, más bien) con los medios de comunicación nacionales e internacionales, ha lanzado todo tipo de acusacioes contra aquél. La mayor parte de las veces, como el caso que comentaré seguidamente, estas denuncias o acusciones no sólo no tienen el menor fundamento, sino que contradicen la realidad. Pero como "la realidad" es la que se crea a través de los medios de comunicación, los que no responden a nada ni a nadie, ni a leyes ni a ética, ni a pueblos ni gobiernos, sino al capital, estamos fregados. Así, tergiversan y manipulan con total impunidad, y si uno demanda de ellos rectificación, entonces es tachado inmediatamente de "enemigo de la libertad de prensa", como bien lo sabe el presidente ecuatoriano Rafael Correa. Estamos bajo una dictadura global que ataca nuestras mentes, nada menos. Veamos.

Recientemente, otra de las "matrices de opinión" lanzadas contra el gobierno venezolano es sobre su deuda, para crear la imagen de que, seguramente para comprar armas para amenazar a EE.UU. o a Europa (cosa extraña que los países más armados, guerreros y exportadores de armas pueda sentirse amenazado por uno de los ejércitos más pequeños de Sudamérica) o para poner en marcha planes "populistas", Venezuela se endeuda de una manera irracional. Así lo da a entender el diario español "El País":

Entre los varios sinsentidos de esta "noticia", el primero es la evidente  intención de manipular, como si lo que ellos llaman "bonanza petrolera" fuera por sí misma alguna razón para endeudarse en mayor o menor medida. No entenderían entonces cóm Bill Gates, que gana mucho más que yo (sólo un poco) tenga una deuda muchísimo mayor que la mía. Cualquier idiota sabe, salvo los irresponsables gobiernos europeos y EE.UU., claro, que la capacidad de duda está en relación con la capacidad de pago, y que sobre la base de las expectativas de tu negocio puedes pedir préstamos. En el caso de Venezuela, nuestro negocio más importante es el petrolero, y gracias al empuje del gobierno del Presidente Chávez, recientemente se acaba de certificar que las mayores reservas globles de petróleo, esa materia prima básica para la sociedad global moderna, están en Venezuela, como tuvo que reseñar el propio diario. En este artículo de "El País" se lee: "Sin embargo, aunque Venezuela dispone de las mayores reservas, respecto a la capacidad de explotación Arabia Saudí sigue siendo el indiscutible principal productor del planeta con un bombeo por encima de los 8 millones de barriles diarios de media. Venezuela, por su parte, extrae unos 2,8 millones de barriles de crudo al día" El propio artículo reconoce que hay una contradicción entre las gigantescas reservas y una relativamente pequeña capacidad de extracción y refinamiento. Ahora, la pregunta elemental: ¿cómo se supone que vamos a achicar esa gigantesca brecha? La respuesta obvia es aumentando la producción. Pero, también obvio, aumentar la producción, extracción y refinación significa cuantiosas inversiones en estructuras y capacitación de personal. ¿Y de dónde debe salir este dinero? Probablemente los analistas citados en este diario, así como sus editores, quisieran que en vez de "despilfarrar" el erario público en programas de salud, alfabetización, educación, alimentación, etc. que han hecho de Venezuela el país menos desigual de la región según la CEPAL, este dinero fuera destinado a financiar empresas privadas de explotación petrolera que luego se llevarían el producto, junto con el capital y los beneficios, como sucedía anteriormente, pasando por la alcabala del FMI que imponía la cesión de la soberanía, como lo están averiguando muy duramente los ciudadanos europeos, entre ellos los de la propia España. Por supuesto, para afrontar esta cuantiosa inversión sin renunciar a su soberanía, el Estado venezolano ha decidido recurrir a fuentes alternativas de inversión: planes binacionales con chinos o rusos, por ejemplo, en concordancia con la política nacional de independencia del imperialismo estadounidense y de su institucionalidad (FMI, Banco Mundial, etc.)
Es imposible pensar que este elemental razonamiento estuviera fuera del alcance de los "expertos" citados por el diario "El País", evidenciando entonces que estamos ante otro caso más de manipulación de la información. Pero el asunto no acaba aquí. Es que ni siquiera se molestaron en buscar u ofrecer a sus lectores (a los que tratan como a borregos) una fuente, una cita, una cifra que avale el título. Aquí puedo ponerles una bastante fiable: la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), organismo dependiente de la Organización de las Naciones Unidas. Esta tabla está disponible en el "Anuario estadístico de América Latina y el Caribe, 2011" , disponible en línea gratuitamente.

 Más en detalle:

 (Para más detalle haz clic aqui) En esta tabla se aprecia que la deuda de Venezuela en relación con su PIB es de 18,6%, inferior a la media latinoamericana (19,1%) o a la de Colombia (22,5%) y apenas tres décimas superior a la de México (18,3%). Así, vemos que es una mentira o al menos una manipulación decir que Venezuela se está endeudando de manera no justificada o fuera de parámetro. Pero además, este gráfico nos permite ver que lo que ha habido es, por el contrario, una fuerte reducción de la deuda externa desde los niveles de 2003 de casi la mitad del PIB (48,4%) gracias al golpe de Estado y al sabotaje petrolero protagonizados por la oposición "democrática" venezolana hasta el nivel actual de 18,6%. Es decir, al revés de lo que "El País" y el resto de la oposición a Chávez dicen, la deuda externa venezolana ha disminuido un 61,57% en términos de porcentaje del PIB.

Y para que veas como la información se carteliza y se convierte el propaganda al mejor estilo de las enseñanzas de Goebbels, unos botoncitos:
"La Patilla", que titula el 11/01/12 que la "Deuda sube 161% con Chávez" (tremenda joyita de la manipulación esta gentecita):

 O Notitarde, que llegó a decir que la deuda "creció 200%":

Etcétera, etcétera, podría seguir citando hasta el infinito, como infinita es la campaña de mentiras y tergiversaciones que tejen las corporaciones de medios para hacer pasar la propaganda por información mientras defienden únicamente sus mezquinos y excluyentes intereses.

Toda esta información está disponible en la red. Léela y saca tus propias conclusiones.